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Fisioterapia después del Covid-19: La prueba después de derrotar la amenaza

Actualizado: 9 oct 2020


El 31 de diciembre de 2019, las autoridades chinas notificaron a la Organización Mundial de la Salud (OMS) acerca de la presencia de casos de neumonía atípica debido a una nueva enfermedad llamada COVID-19, era el primer indicio de un nuevo virus llamado SARS-Cov-2, de la familia de los coronavirus. Fue en marzo de este año que Covid-19 fue categorizado como pandemia y desde ese mes, en nuestro país hemos pasado de la incertidumbre lo “lo que podría pasar” a “lo que está sucediendo”. Mucho se ha hablado ya acerca de las medidas necesarias para evitar una mayor propagación del virus así como de las complicaciones que genera, los factores de riesgo que predisponen a una mayor gravedad de la enfermedad tales como ser obeso o presentar enfermedades agregadas como Hipertensión Arterial o Diabetes Mellitus tipo II. Llevamos muchos meses preocupándonos por no escuchar aquella frase que muchos le han dado un sentido fatalista y que hoy suena más a sentencia que a tratamiento: “está intubado”.


No quiero decir que los cientos de miles de casos no son importantes, no me malentiendan, pero estamos en un momento crucial en la historia en donde podemos observar perfectamente el comportamiento de mis colegas Médicos, quienes nos enfocamos más por preservar la vida a toda costa y una vez que hemos resuelto la emergencia entonces el paciente llega a tierra de nadie, ya sin enfermedad pero con las secuelas que ella ha traído a su vida. ¿Quién ve a esos pacientes y les da seguimiento para poder reincorporarse a su vida habitual? Porque no es lo mismo vivir a sobrevivir y por ello es importante saber qué sucederá con esas personas que han desafiado al SARS-Cov-2, le han hecho frente, han salido avante de la batalla y ahora inician una más difícil aún.


Los efectos del reposo prolongado en personas hospitalizadas están bien documentados, sabemos con base en evidencia científica que la falta de movilidad provoca un importante desacondicionamiento físico – en adultos mayores la pérdida de masa muscular asciende al 1% por cada día de inmovilidad – y las secuelas de los más graves se pueden englobar en una entidad conocida como Polineuropatía del Enfermo en Estado Crítico (disculpe usted pero los nombre raros le dan sentido de vida al médico) que no es más que la descripción de una enfermedad del músculo y del nervio periférico en pacientes que han tenido que pasar largos periodos de tiempo en unidades de cuidados intensivos y va de la mano de deterioro funcional adquirido en el hospital.


En el caso de nuestros guerreros sobrevivientes al Covid-19 es sumamente importante conocer las fases que caracterizan la evolución del paciente, determinado por la gravedad de la enfermedad, estás son cuatro: Aislamiento, Hospitalización, Terapia Intensiva, Recuperación/Alta Hospitalaria. Sin embargo, si me permiten ser justo con la Medicina de Rehabilitación como una especialidad médica poco reconocida pero sumamente importante después de esas fases, agregaría una quinta: Reintegración.



De tal forma que la Medicina de Rehabilitación inicia ahora con uno de sus más grandes retos en la historia, algo que me atrevería a comparar con aquellas salas de hospital repletas de “pulmones de acero” cuando la pandemia de Poliomielitis, y que no solo ameritará el manejo especializado en Rehabilitación Pulmonar sino de programas individuales de movimiento, fortalecimiento y re acondicionamiento físico que permitan a aquellos sobrevivientes reintegrarse a su vida habitual y que les permita vivir esta “nueva normalidad” con la mejor calidad de vida que solamente un programa Integral de Rehabilitación les puede ofrecer.


Tomando lo anterior, la fase de recuperación y alta hospitalaria deberá ir dirigida a educar al paciente, y a su familia, favorecer el ejercicio aeróbico, incluir ejercicios de fortalecimiento y continuar con un programa con base en técnicas de drenaje de secreciones y técnicas para mejorar la función pulmonar.



Por supuesto el punto clave y más importante es que todas estas acciones e intervenciones estén dirigidas por un Médico Especialista en Rehabilitación, que no solamente se encuentra familiarizado con las complicaciones y secuelas relacionadas con Covid-19, sino que tiene la experiencia y conocimiento necesario para adecuar el programa de Rehabilitación a las necesidades de cada paciente, individualizando el ejercicio terapéutico para transformarlo de una actividad a una Prescripción Médica.


En Clínica Integral Neurova contamos con personal especializado en prescripción de ejercicio terapéutico, ya sea que quieras mejorar tu calidad de vida o hayas tenido una infección por Covid-19, ¡podemos alcanzar juntos tus objetivos y mejorar tu calidad de vida! Ponte en contacto con nosotros. Contamos con orientación de manera virtual para iniciar tu rehabilitación cuanto antes.




Referencias y fuentes de información:

1. Ibarra JL., Fernández MJ., Aguas EV., et al. Efectos del reposo prolongado en adultos mayores hospitalizados. An Fac Med. 2017; 78 (4):439-44.

2. Carfa S. The role of Physical Medicine and Rehabilitation medicine in the COVID 19 pandemic: the clinicians view.

3. Denehy L., Lanphere J., Needham D. Ten reasons why ICU patients should be mobilized early. Int C Med. 2017; 43: 86-90.



*Imágenes de infografía de: https://www.flaticon.es/autores/freepik con permiso para su uso en medios digitales e impresos.

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